Una obra maestra para que ver en la Catedral de Siena
La Crucifixión de mármol es una obra maestra imperdible que puedes ver cuando se visita la Catedral de Siena. El relieve forma parte del púlpito de Nicola Pisano, ejecutado para la Catedral de Siena entre 1265 y 1268. En su ejecución también colaboraron su hijo, Giovanni, y su gran alumno Arnolfo di Cambio. Puede decirse que el púlpito sienés amplía, con perfecta coherencia, el tema ideológico y la investigación plástica del primer púlpito que Nicola había ejecutado para el baptisterio de la catedral de Pisa, entre 1255 y 1260.
De un hexágono a un octágono
Entre los dos púlpitos no sólo hay una diferencia en el acabado plástico sino también en la composición, ya que el hexágono se convierte en octógono en Siena; una forma que se aleja cada vez más de la plaza de los púlpitos “románicos”. La composición de las historias de Cristo, que son las historias de la revelación divina, incluye varios episodios ideológicamente conectados; episodios que no tienen cesura arquitectónica pero que están encadenados entre sí: Nicola evita la mera sucesión de hechos, ya que cada historia esculpida aísla un hecho, resumiendo el antes y el después, las causas y los efectos.
Pulpito, Nicola Pisano, Catedral de Siena
Establece un centro compositivo, un núcleo de acción que enfatiza las figuras por su identidad histórica.
Las diversas figuras de las sibilas, así como las de los personajes mitológicos, tienen significados complejos, cuyos antecedentes se encuentran en las tradiciones doctrinales e iconográficas del arte lombardo, toscano y francés.
Y es de este último que Nicola sintetiza los elementos, asimilándolo al clásico romano.
El artista ya se había enfrentado a los modelos clásicos cuando trabajaba en el campo de Pisa, pero en Siena llega a una extraordinaria interpretación de las fuentes romanas, ya no sólo en el equilibrio de la composición, sino también en la dureza dramática del relato: se aprecia en esta Crucifixión de fuerte tono dramático, casi caricaturizado en algunas figuras como la de abajo a la derecha
Una nueva interpretación de las emociones.
Lejos de aquellas representaciones inmóviles de épocas anteriores, aquí las masas de cuerpos se rompen al ritmo apremiante de los gestos enlazados, la línea continuamente quebrada subraya el chasquido de los movimientos y concentra la fuerza expresiva de los rostros. La desesperación de Juan al pie de la cruz contrasta con el miedo y el terror de los hombres del otro lado; la Virgen desmayada muestra su total resignación en su rostro, mientras es sostenida por las piadosas mujeres detrás de ella.
Toda la vitalidad y tensión dramática de los personajes será una peculiaridad en la obra del hijo de Nicola, Giovanni, quien también creará las maravillosas estatuas de primer orden de la fachada del Duomo de Siena.
Esto, por lo tanto, junto con las muchas obras presentes en la Catedral de Siena, se puede descubrir a través de una visita guiada por el complejo ⟢
Bibliografía
G.C.Argan; Storia dell’Arte italiana, Ed. spec per il Corriere della Sera, su licenza di RCS Libri S.p.A. Milano, 2004; N.33, pp.451-453 (edición italiana)