El museo de pintura más grande en Italia
Déjate acompañar en una visita guiada de la Galería de los Uffizi para descubrir los secretos de lo que es, por colección, el museo más grande de la pintura en Italia; gracias a este recorrido, conocerás las grandes obras maestras del Renacimiento italiano y europeo.
La visita a la Galería de los Uffizi también es una experiencia imperdible a la hora de querer comprender en pleno el concepto de Florencia como la cuna de esa extraordinaria temporada cultural conocida como el Renacimiento. A través de los pasillos del museo es posible percibir cómo, a lo largo de los siglos, la busca de un canon de belleza siempre ha sido una particular aspiración de los florentinos. En casi cien salas de exhibición – que son cofres del tesoro de grandes obras maestras –, veremos pinturas preciosas que van desde el siglo XIII hasta el siglo XVII, desde la ‘humanidad’ de Giotto hasta la ‘naturaleza’ de Caravaggio, pasando por la elegancia de Botticelli, la gran perspicacia científica de Leonardo da Vinci, la ‘gracia’ de Rafael y el ‘potencia’ de Miguel Ángel, además de las obras de algunos pintores del norte de Europa, como el alemán Alberto Durero.
Comenzamos nuestro recorrido por la Galería de los Uffizi desde el segundo piso, que es donde ya encontramos una entorno de gran impacto, completamente decorado en las bóvedas con «grutescos».
La maravillosa galería de las esculturas
Ésta es una galería donde también se guarda una magnífica colección de estatuas y bustos antiguos que pertenecieron a la familia Medici. Las primeras salas que veremos serán las de la pintura medieval, allí donde se conservan algunas de las obras maestras de Giotto, el «fundador» de una nueva manera de pintar tras de aproximadamente mil años en que se le había visto la pintura anclada a los estilemas convencionales; según una definición eficaz del tratadista Cennino Cennini, Giotto fue quien «volvió a cambiar el arte del pintar del griego al latin para luego reducirlo al moderno». Veremos la refinada Anunciación de Simone Martini, una de las obras más preciosas de los Uffizi. El esplendor del pan de oro de estas primeras obras que verás en el museo es algo que te sorprenderá aún más cuando estaremos delante de la Adoración de los Reyes de Gentile da Fabriano.
Las pinturas de Botticelli
Con las obras de Filippo Lippi – un fraile carmelitano muy apreciado por su arte en Florencia –, descubrirás dónde tuvo su origen la habilidad del que fue el discípulo más famoso de este pintor: Sandro Botticelli. De este último admiraremos obviamente las obras maestras más conocidas en Florencia y aquí conservadas: la Primavera y el Nacimiento de Venus, dos iconos auténticos dentro de este santuario de la pintura. De estas dos obras descubriremos todos los secretos y razones por las que siguen fascinando los visitantes. Continuaremos nuestro tour de la Galería de los Uffizi viendo las obras de los pintores flamencos Rogier Van Der Weyden y Hugo van Der Goes; de este último veremos el famoso Tríptico Portinari, un gran retablo que cela muchos secretos que esperan ser revelados …
Luego continuaremos nuestro recorrido hacía la espectacular Tribuna, la primera sala del complejo que se concibió, ya en 1580, como un espacio museístico. La imagen de los cuatro elementos está enfatizada dentro de este espacio octogonal, un número que tenía un valor simbólico particular entre los que practicaban la alquimia en el siglo XVI. Al llegar al centro de la galería, alcanzaremos un punto panorámico donde no puedes resistirte a la tentación de tomar fotos por la hermosa vista que allí se disfruta; mirando a la derecha, podrás admirar edificios como el Palazzo Vecchio y al fondo la Cúpula de la Catedral; a la izquierda tendrás una hermosa vista del río Arno y de la serie de puentes florentinos, entre cuales destaca el espectacular Ponte Vecchio. Más allá del río se pueden ver algunas villas, la iglesia de San Miniato al Monte, el refinado Kaffehaus – uno de los primeros ejemplos de este tipo que se construyó en Italia –, y, finalmente, el Jardín de Boboli.
Leonardo, Rafael y Miguel Ángel
Después de haber disfrutado del panorama sobre el río, continuaremos nuestra visita guiada de la Galería de los Uffizi descubriendo las salas con obras de otros artistas importantes, hasta llegar a la sala dedicada al gran Leonardo da Vinci, del cual podremos admirar la Adoración de los Reyes y la Anunciación; en esta última pintura podremos ver con sorpresa cómo, a través su iconografía y su numerología celada, la obra está enlazada a conceptos teológicos que tenían una importancia relevante en la época del artista. En una de las siguientes salas se pueden ver las pinturas ejecutadas por dos grandes protagonistas del Renacimiento, es decir, Rafael y Miguel Ángel. La colocación en una única sala de las obras de los dos maestros nos permitirá redescubrir el vínculo que las unió al destino del rico comerciante quien las encargó: Agnolo Doni …
Las pinturas de los maestros vénetos y de Caravaggio
Una vez terminado de visitar el segundo piso, llegaremos al primer nivel donde, en la serie de salas que se abrirán frente a nosotros, podremos ver las obras de los Manieristas, es decir, las pinturas de aquellos artistas quienes a mediados del siglo XVI tenían una forma toda personal para reelaborar la lección de los grandes maestros a principios de siglo. Entre ellas, las pinturas de Rosso Fiorentino y Pontormo – los dos Manieristas más famosos – no pasan desapercibidas; luego siguen las obras de artistas menos excéntricos y más enlazados a la «buena manera», como Agnolo Bronzino, pintor de la corte de los Medici y uno de los artífices más refinados de mediados del siglo XVI. Otra colección importante de los Uffizi es la de los pintores vénetos; entre estos se conservan obras de grandes personalidades, como Ticiano, Tintoretto y Paolo Veronese.
Terminaremos nuestro tour de la Galería de los Uffizi visitando las salas de la pintura del siglo XVII, en que están albergadas las obras de Caravaggio, el ‘padre’ de la ‘pintura moderna’. Del gran artista lombardo veremos la famosa Medusa – una imagen impresionante por lo que tiene que ver con su fuerza expresiva y las novedades conceptuales que alberga –, el Sacrificio de Isaac y, finalmente, el Baco. Gracias a la multitud de obras maestras y al vasto período cronológico al que remontan, una visita guiada de la Galería de los Uffizi no es simplemente la visita a un museo que conserva pinturas y esculturas, sino que representa un viaje en la historia de la belleza.